miércoles, 6 de diciembre de 2006

6 de Diciembre (II)

La fiesta de San Nicolás de Bari me resulta muy entrañable por cuestiones de familia. A este santo se le tiene una gran devoción en todo el mundo, entre otras cosas porque vela especialmente por los que andan con problemas de bolsillo. Cuentan que un padre de familia que vivía en su ciudad, se había arruinado. El hombre sólo tenía tres hijas mujeres. En aquella época, para dar una hija en matrimonio, el padre -además de la novia- debía aportar una dote sustanciosa para el futuro yerno. Pero este hombre arruinado como estaba, no podía casar a sus hijas, ni tampoco mantenerlas; de modo que desesperado ante la pobreza decidió mandar a su hija mayor a ganarse la vida a la calle como fulana. Al enterarse de esto, se cuenta que Nicolás entró por la noche en casa de la familia y dejó una bolsa con el dinero suficiente para una dote. Y así lo hizo sucesivamente hasta que el padre pudo casar a las tres niñas.

Con el paso del tiempo, parece que el santo obispo mantiene su simpatía hacia estos padres a los que Dios bendice con una colección de mujercitas, aunque varíe sus métodos de financiación. En el caso de mi padre, que tiene cinco (cuatro hijas y mi madre) la ayuda del santo le ha venido por un negocio que lleva su sello. Hace más o menos diez años, mi padre compró unas tierras que pertenecían a la antigua hacienda colonial llamada San Nicolás. Después de años de trabajo aquel pequeño valle de cañaverales y espinos se convirtió en un viñedo espléndido. Las parras se llenaron de racimos grandes y dulces y, por ahora, a mi padre le ha permitido casar al menos a la segunda de su prole. En agradecimiento, dos vinos que se producen allí -un vino de consagrar y otro dulce de la familia del moscatel- llevan el nombre del santo. Que es de bien nacidos ser agradecidos, así que ¡A la salud de San Nicolás!


[Cosas de la red, no pude publicar estas entradas ayer que era el día preciso. Pido a mis comprensivos lectores/as que hagan la vista gorda, o como dicen los yankees, make believe...que en lugar de un 7 hay un 6]

6 comentarios:

Inma dijo...

Muy bonita historia, AnaCó. Lástima no haberla tenido ayer, pues seguro que hubiera abierto una botella de vino,para brindar por San Nicolás de Bari, por el espléndido viñedo de tu agradecida familia, cantando el precioso estribillo y todo. Y es que nuestra Constitución, no da para tanto, qué le vamos a hacer.

Creo que lo celebraré hoy,pues, atendiendo a tu petición final.
¡Gracias!

Inma dijo...
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Corina Dávalos dijo...

Pues me uno al brindis tardío por los tres motivos: San Nicolás, la Constitución y Quito, con estribillo.

Anónimo dijo...

No quiero parecer ni quisquilloso ni puntilloso (aunque lo soy), pero aclaro que los Yankees dicen "make believe that...." Belief es un substantivo (creencia).

Corina Dávalos dijo...

Gracias al u.a. por hacerme caer en el error. Y no es quisquilloso ni puntilloso, sólo correcto y corregidor, eso es bueno y se agradece.

Anónimo dijo...

Yo también agradezco a San Nicolás de Bari, porque allí en esa iglesia tan preciosa de mi tierra andaluza me bautizaron y aquí se dice que es la iglesia de los ricos más que nada porque es una iglesia que está cerca del centro de mi ciudad, yo no me puedo quejar y agradezco a San Nicolás que no me falte el trabajo. Gracias San Nicolás

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