Antes de caer cuatro días en cama con un catarro (sí, por un catarro...mala calidad.) pude sacar un par de libros de la biblioteca pública del barrio de Iturrama. Ya no es el mío, pero a esa zona le tengo cariño y vuelvo siempre que puedo. Me gusta ir a leer allí; veo gente variopinta y los amplios ventanales que incitan a mirar los pájaros y los árboles del parque. La bibliotecaria se afana por ordenar todo y mantener el silencio con una mirada inquisidora que lanza por encima de la montura post-mod de sus gafas de pasta naranja.
Buscaba una guía de encuadernación artesanal que había visto hace tiempo, cerca del libro de los cocktails y Sushi para occidentales. (De lo que hice con esos ejemplares, hablaré otro día) Y allí encontré el librico, en su sitio. Y como si viniera en una oferta de 2x1, al sacarlo de la estantería, me cayó este otro, que claramente andaba lejos de su lugar natural. Me llevé los dos. Y ambos me han servido de consuelo para estos días de estornudos y delirios.
De la encuadernación hablaré, siempre y cuando obtenga unos resultados dignos de mencionar. Del otro, Cuaderno de escritura de Carlos Pujol, dejo los aforismos que más me han gustado.
Buscaba una guía de encuadernación artesanal que había visto hace tiempo, cerca del libro de los cocktails y Sushi para occidentales. (De lo que hice con esos ejemplares, hablaré otro día) Y allí encontré el librico, en su sitio. Y como si viniera en una oferta de 2x1, al sacarlo de la estantería, me cayó este otro, que claramente andaba lejos de su lugar natural. Me llevé los dos. Y ambos me han servido de consuelo para estos días de estornudos y delirios.
De la encuadernación hablaré, siempre y cuando obtenga unos resultados dignos de mencionar. Del otro, Cuaderno de escritura de Carlos Pujol, dejo los aforismos que más me han gustado.
- Escribir de un modo que dé la sensación al lector de algo que necesariamente tenía que expresarse así, con estas mismas palabras y en este orden. Si cabe algún resquicio para la duda es que nos hemos equivocado.
- El poeta está para ver lo que no se ve, para lo que se ve ya está el resto de la gente.
- Comentario de una escritora: Al terminar la jornada, si veo la papelera rebosante me digo: ¡Qué bien he trabajado hoy!
- Al escribir iluminamos y oscurecemos a la vez.
- No hay más que una cosa que decir, en el fondo ni el más variado de los escritores puede decir dos. El asunto es único, limitación y grandeza de cada cual. Todo está en vestirlo.
- Nuestra verdad no lo es del todo hasta que no encontramos las palabras exactas para decirla.
- No se puede escribir sobre lo que se está viendo, sólo sobre lo que se recuerda o se sueña.
- No hay que ser comprensivo o tolerante con lo que uno mismo escribe.
- Lo que se escribe es nuestro, pero no somos nosotros...
- Escribir todos los días, aunque no apetezca, aunque estemos cansados, aunque no se tenga nada que decir. A la larga, no se sabe cómo ni por qué, el hábito hará al monje.
- Escribiendo siempre nos quedamos a medio camino y el lector ha de recorrer el otro medio.
- La prosa es más difícil, pero el verso vale más.