martes, 26 de octubre de 2010

Memoria del Paraíso



La primera entrada de este blog empezó a flotar en la red el 29 de mayo de 2006. Entonces no sabía muy bien en qué acabaría esta aventura de lanzar escritos al vacío virtual. He tenido la suerte de que hubo un efecto boomerang y, como dice J.A. González Romano, mucha gente allá afuera dio señales de vida. Tuve grandes compañeros de camino desde el principio: Enrique García-Máiquez, Jesús Beades, Rocío Arana, Inma Rodríguez Moranta, José Manuel Mora Fandos, Carlos Rodríguez Morales; y otros que se me quedan en el tintero, pero que los tengo presentes con gran admiración y gratitud. En esos primeros meses estos blogs formaron un auténtico patio de vecinos; y nos lo pasábamos en grande comentando aquí y allí las ocurrencias de unos y otros. Algunos se quedaron en el limbo del blog parado, otros desaparecieron para reaparecer después, luego cada uno tomó su rumbo.

Mi camino me llevó a la poesía, a leer e interesarme por ella, e incluso a atreverme a escribir algún poema. De esas tentativas, palos de ciego llenos de ilusión, que aquí llevaban la etiqueta de "aprendiz de poeta" fueron saliendo versos, poemas y algún premio literario (el susto de que esto podía ir en serio me lo llevé en 2008, cuando quedé finalista del premio Adonáis de poesía y de la primera edición del premio ECOEM.)

Finalmente, dentro de un par de semanas, gracias al apoyo de Javier Sánchez Menéndez, mi editor; saldrá a las librerías mi primer libro de poemas: Memoria del paraíso, dentro de la colección Isla de Siltolá. Os adelanto algo que he escrito en la página de agradecimientos del poemario:
"Muchas gracias a los lectores, anónimos y con nombre propio, de Ráfaga de Letras."
Por dar señales de vida. Y como dicen los toreros (y Aute en su Mano a Mano), que Dios reparta suerte y va por ustedes.

A modo de epílogo: Sólo me queda deciros que, a pesar de lo que digo con cierta ironía en uno de mis poemas,
Bien dijo aquel filósofo ateniense:
habría que expulsar a los poetas.
Nosotros somos hoy más tolerantes,
pragmáticos también y ya nos vale
con no comprar sus libros e ignorarles.

¡no os lo toméis al pie de la letra! Y para el que siga este interesadísimo consejo, muchas gracias por darle a Memoria del Paraíso un lugar en vuestra mesilla.

22 comentarios:

Castri dijo...

El lugar de la mesilla está listo. Sólo falta que llegue la criatura... ;)

Maria dijo...

Por fin se acerca el diaa en que sale el librooo!!!Que ilusion! Felicitaciones!! Sere la primera en comprarlo!

Anónimo dijo...

Espero que salga el libro pronto, me causa mucha expectativa. Felicitaciones anticipadas!

Anónimo dijo...

Olééééé!!!!!!
Dime que será fácil encontrarlo para los que no vivimos en Madrid ni Barcelona...
Debo

Adelarica dijo...

Tu libro tiene hueco en mi mesilla, eso sí, que está a rebosar (cualquier día Paula me tira a mí y a los libros por la ventana), y lo que es más importante: tiene hueco en mi mente y en mi corazón

Corina Dávalos dijo...

Castri, ¡mil gracias! la próxima en papel eres tú...

Corina Dávalos dijo...

Pues sí, Irene (María) ¡ya puedes ahorrar y pedirlo la primerita! Gracias por escribir...

Corina Dávalos dijo...

Mi querido anónimo bien conocido, espero satisfacer esas expectativas, que eres un lector exigente. ¡Abrazo!

Corina Dávalos dijo...

Debo, obviamente a ti no te hará falta comprarlo, pero por si lo quieres regalar, haremos gestiones para que esté disponible en Pamplona. Abrazo!

Corina Dávalos dijo...

Gracias, Álvaro, ese sí que es un lugar privilegiado...inmerecido. Avísame cuando Paula decida tirar los libros por la ventana, a ver si consigo hacerme con alguno, ¡que seguro serán buenísmimos!

Julia Fdz. Tellechea dijo...

Platón debió de hacer una excepción contigo. No tengo mesilla, pero no podría leerte tumbada, de la ilusión me imagino que leo "Memoria del Paraíso" atropellando a mis hijas por los pasillos de casa.

Manec dijo...

Qué emoción! Te felicito muchísimo, eres toda una promesa para la poesía ecuatoriana! Espero con toda la ilusión que se pueda comprar ya un ejemplar! Felicitaciones!!

batiscafo dijo...

Felicidades, maja. Qué ganas de leerlo.

Anónimo dijo...

Oyes ve, y saldra a la venta por estas tierras ecuatoriales? Si no te toca traer algunitos en la mochila para los de la llacta.

E. G-Máiquez dijo...

Oh, qué ganas.
Especialmente bonito el verde en la portada, y apropiado.

Corina Dávalos dijo...

Gracias por los comentarios! Ya te contaré de dónde ha salido ese verde, Enrique (y no es el Betis, eh!) Julia, ¡por Dios no las atropelles, qué van a pensar de la literatura!
Cris, a ver cuando te animas tú. Manec, me ha emocionado eso de "poesía ecuatoriana"...made in Spain.

Carlos RM dijo...

Qué alegría, mi enhorabuena. Y me doy por agradecido ("Muchas gracias a los lectores (...) de Ráfaga de Letras). Qué tiempos, no tan lejanos (y sin embargo...) del grupito que citas. Gracias a ti también.

Corina Dávalos dijo...

Carlos! qué gusto verte por aquí. Espero verte pronto en papel, que lo que flota virtulamente en tu blog lo merece sin duda. Un abrazo!

enrique baltanás dijo...

Mi más entusiasta y sincera enhorabuena por tu libro, estimada Corina. Hacía mucho tiempo que no leía un libro bueno de un poeta joven. Para serte completamente sincero, lo que no veo demasiado claro es la sección de los haikus: más de uno me parece prescindible, aunque los hay también muy buenos.
Salvo eso (que es discutible) gratísima impresión. Fresca y femenina poesía de verdad.

Corina Dávalos dijo...

Muchísimas gracias por tu generoso comentario Enrique y también mi enhorabuena a ti por las trece elegías, que estoy leyendo encantada, y a la espera de que me llegue Minoría Absoluta, que soy fan de tus volaterías. Gracias, de verdad.

Juan Antonio González Romano dijo...

Muchas gracias, Corina, por tus versos y por la mención en una entrada tan relevante como esta. Me ha gustado mucho tu libro y hoy le dedico unas palabras enm mi blog.
Besos y buien domingo.

Corina Dávalos dijo...

Muchas gracias por tu interés Juan Antonio, perdona que no haya respondido antes, he estado off-line estos días. Un abrazo!

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