Tenía 17 años cuando terminé el bachillerato. No sabía qué estudiar, mi madre quería que aprendiese otro idioma y a mi padre no se le podía ni mentar la idea de que me fuese de casa a más de cien kilómetros a la redonda. Cómo no, se hizo lo que decía mi madre; y yo pasé casi un año en Lugano, en una especie de internado en el que estudiaba Cultura Europea por inmersión. Fue mi primera experiencia multirracial, ecuménica y plurilingüística (si se me permiten tantos palabros juntos...)
Había en el colegio dos coros, uno semidemocrático en el que podía cantar cualquiera que no tuviese un oído en frente del otro, y otro para la aristocracia musical del campus. Yo me apunté a los dos y me aceptaron en ambos. Una de las primeras piezas que aprendí fue el Stabat Mater de Pergolesi. Recuerdo con emoción los ensayos. Éramos apenas doce entre chicos y chicas, y Mr. Malins -un inglés doctorado en trompeta- que fungía de director. No sé si había más católicos en el coro, o yo era la única. Sólo recuerdo la impresión que me causó ver la delicadeza y el sentimiento con que cantaban, el himno latino a la Virgen Dolorosa, unas japonesas completamente ajenas a la fe cristiana. Creo que fue la primera vez que percibí, de forma rotunda, la Fe como don.
Mientras yo rezaba el Stabat Mater, siguiendo dócilmente la partitura de Pergolesi, las japonesas sólo cantaban. No sé si después sus caminos les llevarían a profundizar en el sentido de lo que cantaban en nuestro pequeño coro, pero tengo la seguridad de que la belleza y la devoción de la Fe que impregnaba nuestros cantos, les despertaría de algún modo eso que todos los hombres llevamos grabado en el alma: la nostalgia de Infinito.
STABAT MATER
Stabat mater dolorosa
juxta Crucem lacrimosa,
dum pendebat Filius.
Cuyus animam gementem,
contristatam et dolentem,
pertransivit gladius.
O quam tristis et afflicta
fuit illa benedicta
Mater Unigeniti.
Quae moerebat et dolebat,
Pia Mater cum videbat
Nati poenas incliti.
Quis est homo qui non fleret,
Matrem Christi si videret
in tanto supplicio?
Quis non posset contristari,
Christi Matrem contemplari
dolentem cum Filio?
Pro peccatis suae gentis
vidit Jesum in tormentis
et flagellis subditum.
Vidit suum dulcem natum
moriendo desolatum,
dum emisit spiritum.
Eia Mater, fons amoris,
me sentire vim doloris
fac, ut tecum lugeam.
Fac ut ardeat cor meum
in amando Christum Deum,
ut sibi complaceam.
15 comentarios:
Se trata de otra rama cristiana, pero siento lo mismo cuándo oigo (no puedo cantar) el famoso coro del Hallelujah de Handel. Esa música, para mi, es una de las raras "pruebas" del infinito.
Qué preciosa entrada, AnaCó, por el fondo y por la forma. Te sugiero que avances por este camino intimista de la prosa poética. Te lo sugiero, y te lo pido. Me conmueve por varias razones (¿o no son razones?): el Stabat Mater de Pergolesi es de una belleza venerable. Te recomiendo también, si no lo conoces, el de Boccherini. Lo de la "nostalgia de infinito" es tremendo. Y la foto de la Piedad sevillana de los Servitas (aunque iconográficamente no se ajusta al texto) es lo que me faltaba, que no me faltaba, para emocionarme.
El Hallelujah de Handel es magnífico. Sería estupendo, una prueba no racionalista de la amistad con Dios. Prometo una entrada sobre la música en la liturgia. Gracias Carlos por las sugerencias, intentaré hacerme con el Stabat Mater de Boccherini. Y tienes razón la imagen no se ajusta exactamente al texto, pero ya sabes, cosas de sevilladictos...
...Y tú hermosísima expresión de los Dolores, que llevas a la Providencia de Dios en los brazos para testimoniar el quehacer callado y sereno de tu Cofradía...Ahora estamos en plena luz; en el camino que nos marca la esperanza inmensa del hombre que tiene Fe. Ya abandonamos las tenebrosas sombras, en las que brillaba también el hilo, tenue pero cierto, de una Fe buscada con ansia. ;)
Olé, maestra!
Muy bonita prosa. Perfectamente enlazados tus recuerdos de adolescencia con la música clásica y la letra latina. El acorde, que diría Cernuda.
La nostalgia del Infinito...
Hace años alguien me habló de esto, como la búsqueda constante del ser humano, como la impronta grabada en lo más profundo de aquello de donde venimos
La nostalgia del infinito...
Gracias AnaCó por esta entrada tan precisosa! Conozco el caso de una alumna de Medicina que "decidió" que Dios existía y bautizarse porque en su coro cantaba el Hallelujah de Handel. Así me lo confesó.
Yo me estremezco y se produce un seísmo en mi ser cada vez que escucho La Misa de la Coronación de Bach.A veces tengo que dejar de escucharlo!
Me has convencido para conocer a Pergolesi. ¡Eres una sorpresa de dones, AnaCó!
Sigue llevándonos hacia arriba.
Ah, recuerdos de nuestra peluquera, Sara.
Jacin
Debo, ¿qué haces en Alemania cuando aquí, en tu casa, hay un super congreso sobre la identidad cristiana y la sociedad civil? No entiendo nada de lo que dicen. Sufro.
Qué me cuentas, Debo. Guarda todos los papelitos, que yo sufro por no estar allí;) Hablaremos a la vuelta! Y Jacin, ya me dirás qué te ha parecido Pergolesi.
Gracias. Estaba gozando con la belleza del stabat mater y necesitaba saber la letra para disfrutar más aún. A esto llamo yo sensibilidad en su más pura expresión. Debiera haber aquí una conexión para quien quisiera, accediera a oirlo.
Stabat mater
Stabat mater dolorosa
Juxta crucem lacrymosa
Dum pendebat Filius.
Cujus animam gementem
Contristatem et dolentes
Pertransivit gladius.
O quam tristis et afflicta
Fuit illa benedicta
Mater unigeniti.
Quae morebat et dolebat
et tremebat cum videbat
Nati poenas inclyti.
Quis est homo qui non fleret
Christi Matrem si videret
In tanto supplicio?
Quis posset non contristari
Piam Matrem contemplari
Dolentem cum Filio?
Pro peccatis suae gentis
Vidit Jesum in tormentis
Et flagellis subditum.
Vidit suum dulcem natum
Morientem desolatum,
Dum emisit spiritum.
Eia Mater fons amoris,
Me sentire vim doloris
Fac ut tecum lugeam.
Fac ut ardeat cor meum,
In amando Christum Deum
Ut sibi complaceam.
Sancta Mater istud agas
Crucifixi fige plagas
Corde meo valide.
Tui nati vulnerati
Jam dignati pro me pati
Poenas mecum divide.
Fac me vere tecum flere
Crucifixo condolere
Donec ego vixero.
Juxta crucem tecum stare
Te libenter sociare
In planctu desidero.
Virgo, virginum praeclara
Mihi jam non sis amara
Fac me tecum plangere.
Virgo, virginum praeclara
Mihi jam non sis amara
Fac me tecum plangere.
Fac ut portem Christi mortem
Passionis ejus sortem
Et plagas recolere.
Fac me plagis vulnerari
Cruce hac inebriari
Ob amorem Filii.
Inflammatus et accensus
Per te Virgo sim defensus
In die judicii.
Fac me Cruce custodiri
Morte Christi praemuniri
Confoveri gratia
Quando corpus morietur
Fac ut animae donetur
Paradisi gloria. Amen.
Hola, estoy cantando el Cujus animam Gementem de este satabat mater y pese a que comprendo el caracter y el sentido del texto, desconozco su traducción exacta, el latín definitivamente no es mi fuerte, acepto ayuda
"Su alma gimiente,
triste y dolorida
una espada traspasaba.
¡Oh qué triste y afligida
estuvo aquella bendita
Madre del Unigénito"
La primera vez que escuché el STABAT MATER iba caminando por las calles angostas de la antigua Ciudad de Girona, en la Catalunya, España... entré inmediatamente al recinto donde un aparato de reproducción de sonido, vociferaba los magníficos acordes y la melodiosa, divina, encantadora e hipnotizante letra del STAAT MATER, el costo del CD fue de 13€... y no se imaginan lo orguloso que me siento de haber hecho esta inversión, para ellos quizá fueron 13€... pero para mí no tiene precio... aún escucho el CD, día y noche sin que siente aburrimiento del mismo... Ariel ariel_hmt@hotmail.com
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