jueves, 3 de junio de 2010

Under the rainbow

Quedan dos meses antes de que se esfume el arcoiris. Después, nunca se sabe. He tenido una visita entrañable durante 15 días. Sólo una madre se sube en una vespa roja con su hija al volante en Pamplona, la ciudad de las rotondas, ¡con el miedo que le dan las curvas! Reímos mucho, comimos bien. Y hablamos, y hablamos, y hablamos hasta bien entrada la noche, día tras día.
Ahora de vuelta al trabajo, con calor y el polvo que levanta el incipiente edificio de la Facultad de Económicas. En breve empezará a levantar polvo el Museo. La biblioteca ha pasado de ser un Think tank a un tank a secas. No he pasado por tantas medidas de seguridad ni en los aeropuertos de EEUU tras el 11.S. Se ha puesto enferma una profesora a la que admiro mucho. Una amiga, muy amiga casi no lo cuenta tras un accidente en moto. Y eso que seguimos bajo el arcoiris. Ya en agosto se verá cómo se aleja el polvo cuando sople el viento. Y hacia qué dirección sopla. Lo mío por ahora será seguir, procurando que los libros no me miren con la hojas polvorientas. Trabajar mucho, mucho, mucho. Que el final está muy cerca y quedan dos meses antes de que se pierda el arcoiris.

2 comentarios:

E. G-Máiquez dijo...

Qué bonita entrada.

Corina Dávalos dijo...

¡Gracias!

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