lunes, 6 de junio de 2011

Por no hacer mudanza en su costumbre...

He cambiado de ciudad, de trabajo y hasta yo misma me encuentro distinta y cambiada. Incluso he pensado cerrar las ráfagas y crear un nuevo espacio -borra y va de nuevo- para escribir. La experiencia me ha enseñado que el cambio es siempre continuidad, (y no soy reaccionaria) por mucho que nos empeñemos en inaugurar la vida. Comienzo sólo hay uno. Lo demás son vericuetos y peripecias en la trama, algunos tan desconcertantes que parecerían un comienzo nuevo. Creo que sólo hay un espacio de re-creación, tan delicado y misterioso que pasa desapercibido a los ojos que ven y al corazón que siente. Sólo cuando el suave dedo de Dios toca el alma (ego te absolvo) para perdonar hay una novedad real. Curioso. Lo más real es lo menos tangible. Todo un reto para este tiempo que se queda en dos dimensiones con frecuencia: lo material y lo virtual. Y sin embargo... lo más real, lo único importante, ya lo dijo Saint Exupery, sólo se ve con el corazón, cum fide.
Llueve con fuerza. ¿Quién dijo que el norte era lluvioso? Madrid es un continuo lagrimeo. Al menos así me parece que no he dejado el norte. Que no lo he perdido.

8 comentarios:

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Chance AnaCo.
UN fuerte abrazo.

Carlos RM dijo...

Te vas acercando a Sevilla... Un placer leerte, como siempre, aunque no deje por aquí mis huellas dactilares.

Corina Dávalos dijo...

Gracias, Javier. Que vaya bien la presentación y muchas gracias por tu libro, lo voy bebiendo a sorbitos.

Corina Dávalos dijo...

Carlo, muchas gracias por dejar esta vez tus huellas, es siempre dulce saberse acompañado. Me acerco as Sevilla, sí, aunque no sé si a Sevilla le importa mucho que yo me acerque. Un abrazo.

Carlos RM dijo...

AnaCó, Sevilla se basta y se sobra; tiene ese puntito autosuficiente y altivo. No sé si a pesar de eso nos gusta, o si nos gusta precisamente por eso.

Corina Dávalos dijo...

Buena disyuntiva, Carlos. A pesar de... quizá sea mi respuesta.

Anónimo dijo...

Sevilla, autosuficiente y altiva... Buena apreciación. A alguien tuve que salir ;)

Corina Dávalos dijo...

¡Eso mismo pensé yo!;)

¡Feliz Navidad!